sábado

Demasiado tarde.

-''¿Te puedo pedir una cosa?
-Si dime
-No te acostumbres ami
-¿Cómo?
-Que no te acostumbres ami, ni a mi risa, ni a mi hiperactividad matutina, ni a mis sonrisas en esos momentos, ni a mis besos, ni a mi olor. No te acostumbres a que te ayude con los deberes, ni que hablemos de tus problemas, ni a que te escuche con atención. No te acostumbres a como te miro o te dejo de mirar... No te acostumbres, en serio.
-¿Y eso a que viene?
-A nada, simplemente algún día me cansaré y me iré, y echarás de menos a esas cosas a las que un día te acostumbraste...''








Y nuestros castillos de arena, caerán, dejarán de existir como si nunca hubiesen estado ahí, se convertirán en montones de pequeños granos, amontonados en una maleta sin fondo, sin sentido, sin mayor existencia que el recuerdo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario